Tragedia en Maipú: madre e hijo murieron intoxicados con monóxido de carbono

Una nueva tragedia enluta a la provincia de Mendoza. En la siesta de este lunes, una mujer y su hijo de 14 años fueron hallados sin vida en su vivienda, ubicada en una finca en el cruce de las calles Avellaneda y Los Álamos, en el departamento de Maipú. La causa: una intoxicación por monóxido de carbono, producto del uso de un brasero encendido durante la noche para calefaccionarse.


El hecho fue reportado a través de un llamado al 911 a las 13.30. Al llegar al domicilio, efectivos de la Comisaría 61ª fueron recibidos por un joven, hijo mayor del matrimonio, quien relató que al visitar a su familia encontró la casa cerrada. Al no obtener respuesta desde el interior, decidió forzar la entrada. Fue entonces cuando descubrió el horror: su madre y su hermano menor no presentaban signos vitales, mientras que su padre se hallaba inconsciente pero con vida, por lo que fue trasladado de urgencia y permanece internado en grave estado.
De acuerdo a las primeras pericias, la familia habría encendido un brasero durante la noche para combatir las bajas temperaturas que afectan a la provincia. La combinación de falta de ventilación y la combustión incompleta del carbón habría generado una concentración letal de monóxido de carbono, un gas sin color, olor ni sabor, pero extremadamente tóxico.
Policía Científica y personal de Bomberos trabajaron en el lugar para realizar los peritajes correspondientes y confirmar las causas del deceso.
Este nuevo hecho se suma a una serie de muertes registradas recientemente en distintos puntos de Mendoza por la misma causa. El monóxido de carbono, conocido como “el asesino invisible”, vuelve a cobrar víctimas en un contexto de ola polar y vulnerabilidad.
Las autoridades reiteran la importancia de extremar los cuidados al utilizar artefactos para calefacción, especialmente aquellos que funcionan a leña, carbón o gas. Se recomienda ventilar los ambientes, evitar dejar braseros encendidos durante la noche, y verificar periódicamente el correcto funcionamiento de calefactores y estufas.
Una vez más, el frío extremo y la necesidad de calor en los hogares se cobran un precio irreparable. La comunidad de Maipú y toda la provincia lamentan la pérdida de dos vidas, y se suman al acompañamiento de los seres queridos que atraviesan esta dolorosa situación.

