La Dormida: “Pan, trabajo y salud”, el pedido de los fieles a San Cayetano
Este 7 de agosto, la Capilla San Cayetano en La Dormida se convirtió en el epicentro de una jornada marcada por la fe, la unión comunitaria y la esperanza.
Como ya es tradición, los fieles se congregaron para celebrar el "Día de San Cayetano", un evento que trasciende lo religioso y se convierte en un encuentro anual lleno de significado.
La jornada cobró un sentido especial al comenzar con un gesto cargado de simbolismo: la imposición del nombre "Francisca Pancha Silva" al Salón de Usos Múltiples (SUM) de la Capilla.
Panchita, como cariñosamente se le conocía, desplegó una incansable labor en la creación de la capilla y en las actividades eclesiásticas. Su legado perdura y su ausencia deja una huella imborrable.
La Intendenta Municipal Flor Destéfanis, acompañó a los familiares y junto al Padre Marcelo Castro y al Padre Luis, participó en el descubrimiento de la placa conmemorativa, un momento lleno de emotividad y recuerdo.
La jornada continuó con una procesión solemne y una misa, congregando a cientos de feligreses que se unieron a la celebración en honor a San Cayetano.
El Padre Marcelo, en su mensaje a la comunidad, transmitió la idea de que San Cayetano escucha y responde a las súplicas de sus devotos con un corazón abierto y compasivo.
La tradición perdura, y con cada año que pasa, la Capilla San Cayetano se convierte en un símbolo tangible de la devoción y el compromiso de la comunidad con valores como el amor, la solidaridad y la esperanza.